La nieta de Juan Carlos I tiene planeado seguir su futuro en la misma línea que su hermano esperando la ayuda de su abuelo para su carrera profesional
Irene Urdangarin, hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, tiene claro su futuro académico. Este año culminará sus estudios de bachillerato internacional y finalizará así su etapa escolar. A través de sus redes sociales, se ha podido intuir que su sueño es regentar una cadena de restaurantes, por lo que se enfocará en la dirección y administración de empresas en el mundo de la hostelería.
En su perfil de Instagram, Irene Urdangarin escribió “EHL”, unas siglas que podrían corresponder a la prestigiosa École Hôtelière de Lausanne, una escuela privada ubicada en Suiza. Si opta por esta universidad, considerada la mejor del mundo en dirección y administración de hostelería, continuaría residiendo junto a su madre en Ginebra.
El elevado coste de la educación y el apoyo del rey emérito
Estudiar en la École Hôtelière de Lausanne no es económico, ya que cada curso tiene un precio de 35.000 euros, sumando un total de 140.000 euros en cuatro años. Sin embargo, esto no es un problema para Irene Urdangarin, quien siempre ha estudiado en los mejores colegios. Es Juan Carlos I quien se encarga de sufragar estos gastos, así como los de sus otros nietos, excepto Leonor y Sofía, cuyos estudios son financiados por sus padres, Felipe y Letizia.
Desde que Iñaki Urdangarin entró en prisión, el emérito ha ayudado a la infanta Cristina en todo lo relacionado con sus cuatro hijos. A pesar de que la hija de la reina Sofía y Juan Carlos no tiene problemas económicos, el rey emérito no la ha dejado sola. Irene Urdangarin habría compartido sus planes de futuro con Juan Carlos, quien estaría encantado de ver a sus nietos cumplir sus sueños.
Iñaki Urdangarin, desvinculado de los gastos de sus hijos
Durante los últimos años, los cuatro hijos de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina han sido mantenidos por su madre y Juan Carlos I. El exduque de Palma, según Pilar Eyre, no ha querido aportar económicamente, ni siquiera ahora que cobraría 6.000 euros mensuales de la mano de la infanta Cristina. Cuando se concrete el divorcio, ingresará 25.000 euros mensuales, dos millones de euros como indemnización y varias propiedades de la costa francesa a su nombre.
Además, habría pedido que se le financien todos los viajes relacionados con sus hijos. Por su parte, los hijos de la infanta Cristina han sido siempre estudiosos y educados, nunca han dado problemas a sus abuelos. Esto contrasta con Froilán y Victoria Federica, en quienes el padre de Felipe VI no ha tenido control.