Pedro Sánchez confirma inversión española de 45.000 millones en Marruecos hasta 2050
Durante su visita al reino alauí, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha anunciado un ambicioso plan de inversiones que asciende a 45.000 millones de euros hasta el año 2050. Este gesto refuerza las ya sólidas relaciones entre España y Marruecos, que, según Pedro Sánchez, “atraviesan por su mejor momento en décadas”.
Este anuncio no solo simboliza un profundo compromiso con la mejora continua de las relaciones bilaterales, sino que también pone de manifiesto la confianza mutua y el interés compartido en fortalecer lazos económicos y estratégicos. La inversión, dirigida a diversos sectores, pretende ser un motor de desarrollo y prosperidad para Marruecos, al tiempo que abre nuevas avenidas de colaboración y oportunidad para empresas españolas.
Refuerzo de la cooperación bilateral en un contexto de empatía y estrategia
El viaje de Pedro Sánchez a Marruecos se inscribe en un contexto más amplio de movilizaciones de agricultores y ganaderos en España, que también ha repercutido en las relaciones comerciales entre ambos países. Sánchez ha expresado su “máxima empatía” hacia las demandas del sector agrícola español, lo que demuestra la complejidad y la profundidad de la relación bilateral, que abarca desde la cooperación económica hasta la sensibilidad hacia los asuntos internos de cada país.
Además, la visita ha servido para abordar temas cruciales como la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla, una cuestión pendiente que requiere de un acuerdo mutuo para su realización. Aunque no se ha concretado una fecha para la apertura, la disposición de España a avanzar en este tema es un claro indicativo del interés por facilitar un mayor intercambio comercial y humano entre los dos países.
Posicionamiento sobre el Sahara Occidental y cooperación en seguridad
Durante la visita, se abordó la postura de España respecto al Sahara Occidental, con Sánchez reiterando su apoyo a una solución basada en el plan de autonomía que Marruecos propuso. Esta posición refleja un equilibrio en la política exterior española, buscando contribuir a una resolución pacífica y duradera del conflicto.
Sánchez también destacó la cooperación en la lucha contra el terrorismo, la política migratoria y el narcotráfico como ejemplos de “relaciones extraordinariamente positivas” entre España y Marruecos. Estos ámbitos de colaboración son vitales para la seguridad y el bienestar de ambos países, y el reconocimiento de los esfuerzos marroquíes por parte de España subraya la importancia de mantener y profundizar estos lazos.